1
10
1
-
https://www.arxiupmaragall.catalunyaeuropa.net/files/original/30/694/19911129_LV.pdf
3242e75146e5f5306ca920f6d11fbf28
PDF Text
Text
Articles de Pasqual Maragall a LA VANGUARDIA
29/11/1991
La Vanguardia, p.019, Opinión
Sobre Macià y su monumento
PASQUAL MARAGALL
Por fin la hija de Macià y los hijos espirituales de Macià, que somos todos, hemos podido ver
levantado el monumento a l'Avi.
El primer proyecto fue de Peyrí, nieto de Macià, que también estuvo presente en el acto del día
de Navidad. Pere Pi i Sunyer presentó este proyecto al alcalde Narcís Serra. Se titulaba
"Tombes flamejants" y era un gran plantel de metales alzándose hacia el cielo en todas
direcciones desde el centro de la plaza -entonces todavía- de Calvo Sotelo.
Tal como estaba concebido, se hubiera visto desde la parte alta de la Diagonal. Y hubiera hecho
un gran efecto. Pero no nos decidimos. Se impuso la obligación de respetar el magnífico jardín
de Nicolau Rubio y Tudurí.
Oriol Bohigas propuso entonces lo que personalmente creo que era la mejor idea desde el punto
de vista urbanístico: una reproducción del olvidado Sant Jordi ecuestre de Llimona, que se
situaría en la plaza Macià, al inicio de la avenida Pau Casals. Tampoco cuajó. Quizá se quería
algo más corpóreo y monumental, un homenaje menos indirecto y más sencillo.
Nos quedamos sin monumento ecuestre (¡y hay tan pocos!). Puede que algún día podamos
retomar esta idea en el otro extremo de la plaza Macià y para otro gran presidente: Joseph
Tarradellas. La ciudad tendrá que pensarlo. Todas estas decisiones requieren tiempo -pero ni
aun así está garantizado el éxito-.
El diario "Avui" emprendió entonces una campaña popular para el monumento a Macià.
Un tribunal en el que había gente tan prestigiosa como Chillida -que presidía-, el querido
George Collins -el gaudiniano más importante que ha existido- y el propio Oriol Bohigas,
seleccionó un pequeño grupo de proyectos a partir del centenar que se presentaron.
La votación popular sobre esta preselección eligió el proyecto de Vaquero Turcios, que partía
la plaza de Catalunya con un muro bajo las fuentes y proyectaba al cielo un rayo láser con las
cuatro barras, visible -decía el proyecto- desde el Montseny.
No pudo comprobarse la auténtica visibilidad del rayo láser rojo y amarillo -que el
Ayuntamiento había probado a través del haz luminoso situado detrás del Palau Nacional de
Montjuïc- ni gustó a los urbanistas el hecho de que se partiera la plaza Catalunya (si bien de
aquel proyecto quedó -y el concejal Serra Martí la realizó- la idea de prolongar la Rambla
Catalunya a lo largo de la plaza hasta unirla con la Rambla de Canaletes). Por otro lado, los
problemas de sustentación del muro sobre la estación subterránea eran considerables.
El Ayuntamiento, informando al Departamento de Cultura, encargó entonces a los arquitectos
Piñón y Viaplana un Saló Macià en la parte baja del paseo de Gracia, en el umbral de la plaza
Catalunya. Una pieza de Maillol, magnífica, negra; la reurbanización del paseo, que se
planificó peatonal en el centro, como en la avenida Pau Casals o en el paseo Lluís Companys; y
el busto de Clarà -iluminado el 25 de diciembre por un rayo de sol al mediodía- gustaron a
Maria Macià y a buena parte de la crítica.
39 de 204
�Articles de Pasqual Maragall a LA VANGUARDIA
Pero tampoco hubo unanimidad. Finalmente, Lluís Armet y el conseller Guitart acordaron la
salomónica solución que inauguramos esta Navidad. Una pieza de Subirachs, propuesta por el
Consell Executiu de la Generalitat, en un entorno de Piñón y Viaplana. El busto de Subirachs
interpretando el de Clarà, fue para mí una sorpresa de última hora.
El monumento no tiene demasiadas complicaciones y -gustos a parte- será respetado por todos.
¿Y Macià? ¿Será también respetado por todos? Creemos y esperamos que sí. De la misma
manera que creemos y esperamos que lo será Francesc Cambó, a quien pronto los empresarios
del 92 levantarán un monumento, si todo va bien, delante de la fachada del Palau Nacional de
Montjuïc.
Sin Macià (y sin Companys y Layret) el catalanismo popular no hubiese existido. Sólo hubiese
existido un folclorismo y un cultismo interesantes.
La revuelta popular de 1909 -la Semana Trágica-, que marcó los dos campos que años más
tarde, durante la Guerra Civil, se enfrentarían en Cataluña, era una premonición del posible
naufragio político de un catalanismo conservador que no había sabido enraizar en el pueblo y
que reaccionaba con exceso ante la cólera popular.
Francesc Macià reunificó pueblo y catalanismo. No se entiende la pasión partidaria que su
nombre encendió como contrario a los que representaban el otro bando del catalanismo si no se
admite la tragedia anterior.
La restauración del nombre y la figura de Macià en el centro de Barcelona es un paso más en la
asunción de nuestro pasado tal y como realmente fue. Un paso importante.
Queda alejado así el espejismo de una Cataluña milenaria, hija del imperio medieval, que
habría naufragado en el siglo XVIII y resucitado en la entrada del siglo XX reinterpretando el
románico y el gótico para adquirir una madurez definitiva con el Noucentisme, y saltar sin
transición desde el Noucentisme hasta la Generalitat de hoy.
La historia es más compleja y la figura de Macià -como la de Companys- van unidas a la
solución de esta complejidad: pueblo y patria han de unirse no sólo en el mundo de las ideas y
las palabras sino en la realidad de las actitudes y los sentimientos de la mayoría. Las ideas han
de bajar a la calle y hacerse pueblo antes de mover la rueda de la Historia.
Esta fue la acción de Macià y los suyos, como en cierta manera la de Mossèn Cinto Verdaguer.
El período trágico en que sucedió todo esto es tan parte de nuestra historia como los años más
tranquilos y placenteros.
Y si hoy somos el espejo en el cual se miran muchos pueblos, sobre todo en el Este de Europa
pero también en el Oeste, es porque pasamos aquellos difíciles trances, porque derramamos la
sangre que la Historia pidió por nuestros errores y porque todo ello sucedió en torno a figuras
de una gran dignidad, como Francesc Macià, como Francesc Cambó, como Lluís Companys y
como Josep Tarradellas. Ellos marcaron con sus actitudes un camino para ser leído, en medio
del fragor de los terribles acontecimientos del siglo -el peor de la historia de Europa- por las
generaciones actuales.
PASQUAL MARAGALL, alcalde de Barcelona
40 de 204
�
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Title
A name given to the resource
09.01. Activitat de representació (com a Alcalde)
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
1982-1997
Description
An account of the resource
Aquesta sèrie agrupa els documents sorgits de la funció representativa de l'exercici del càrrec d'Alcalde de Barcelona.
Dublin Core
The Dublin Core metadata element set is common to all Omeka records, including items, files, and collections. For more information see, http://dublincore.org/documents/dces/.
Identifier
An unambiguous reference to the resource within a given context
1156
Title
A name given to the resource
Sobre Macià y su monumento
Type
The nature or genre of the resource
Article
Format
The file format, physical medium, or dimensions of the resource
Textual
Source
A related resource from which the described resource is derived
La Vanguardia
Language
A language of the resource
Castellà
Subject
The topic of the resource
Macià, Francesc, 1859-1933
Barcelona
Monuments
Nacionalisme
Catalunya
Barcelona
Creator
An entity primarily responsible for making the resource
Maragall, Pasqual, 1941-
Date
A point or period of time associated with an event in the lifecycle of the resource
1991-12-29
EAD Archive
The Encoded Archival Description is a common standard used to describe collections of small pieces and to create hierarchical and structured finding aids.
Level
The hierarchical level of the materials being described by the element (may be other level too).
Document
Descriptive Identification : Note
Note inside the descriptive identification of an archival description or a component.
Alcalde de Barcelona
Articles